Los trabajadores públicos rechazaron el 5% presentado por el Gobierno Nacional, como parte del ajuste salarial previsto para julio. Desde las organizaciones ven con malos ojos la decisión de no incluir a los sindicatos en la discusión de la definición salarial.
El miembro de la Fenajufe, Thiago Gonçalves, explicó al portal de la CUT Brasil que el salario de los trabajadores se devalúa año tras año como producto de los altos índices de inflación, con las tasas más altas del siglo XXI. Por lo que las condiciones de vida de los funcionarios empeoran junto con el debilitamiento de la seguridad.
“No queremos privilegios ni aumentos salariales en un momento de profunda crisis económica y social. Defendemos que se haga la recomposición inflacionaria del 19,99%, referente a las pérdidas inflacionarias desde 2019”, señaló Gonçalves.
En ese sentido, la federación que representa a los servidores públicos de la Unión del Poder Judicial de Brasil confirmó que mantendrá diálogos con la Presidencia del STF y otros ministros de la Corte, como punto de anclaje para exponer la situación actual y definir una recomposición que esté acorde a las necesidades reales.
La movilización del sector aumentó considerablemente a fines del año 2021 y fue relevante la paralización de actividades durante marzo y abril de este año. El principal pedido fue la recomposición inflacionaria referente a perdidas desde 2019.
