Desde la Central de Trabajadores y Trabajadoras de Brasil expresaron solidaridad con los familiares y compañeros de los trabajadores asesinados, repudiaron los hechos y exigieron una investigación rigurosa para dar con los responsables de tan aberrante situación.
Según confirmó la Federación de Trabajadores Rurales Agrícolas del Estado de Maranhão, los trabajadores del campo viven con miedo permanente y en el último hecho violento que sucedió el pasado 11 de julio murió José Francisco de Souza Araujo, producto de dos disparos.
Desde la organización indicaron que han seguido el conflicto en Vergel desde 2012, por lo tanto, se han intentado contactar de diferentes maneras para concretar reuniones con las autoridades competentes con la esperanza de que se ponga freno a la violencia que sacude a esa localidad del país.
“José Francisco nació y se crio en el pueblo de Vergel y en 2019, debido a un intento de asesinato que sufrió, se mudó con su familia a la comunidad Volta da Palmeira. Vanu, como se le conocía popularmente, estaba muy familiarizado con los conflictos agrarios en la comunidad de Vergel, que ha matado fatalmente a 4 de sus familiares”, sentenció el comunicado de la federación.
Finalmente, las dos organizaciones enviaron un mensaje exhaustivo para que se tomen las medidas que garanticen la seguridad de los trabajadores y trabajadoras del campo y de sus familias, perseguidos por la invasión de tierras comunitarias.
