Trabajadores de las fincas meloneras Santa Rosa, del Departamento de Choluteca, Honduras, encararon una paralización laboral el pasado 11 de abril, en las inmediaciones de una de las plantas de empaque, en defensa de sus derechos laborales. Las fincas pertenecen a la empresa Grupo Sol, de la trasnacional Fyffes Sumitomo de capital japones.
El pedido expone un incumplimiento en el pago de horas extras, salarios y otros derechos básicos que protege la ley, y los cuales, según mencionaron los empleados, se adeudan desde el inicio de la temporada de producción de 2024.
Según el informe presentado por la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la Agroindustria, en el 2016, el periodista Giorgio Trucchi, corresponsal de la Rel-UITA, denunció ante otros medios de comunicación, la violación permanente de los derechos de las mujeres hondureñas que laboran en las meloneras, y que representan un 80% de la fuerza laboral.
Por otro lado, se le suma la falta de buenas prácticas en temas de salud e higiene ocupacional, con casos de trabajadores intoxicados con químicos y agroquímicos.
El caso más reciente, se registró el pasado 27 de marzo, cuando nueve trabajadores de Sur Agrícola de Honduras (Suragroh), empresa productora de melones y subsidiaria de la transnacional frutera Fyffes/Sumitomo (Sol Group Marketing), ingresaron de emergencia en una clínica, intoxicados por una fuga de gas amoníaco.
