Organizaciones sindicales de Paraná, Mato Grosso do Sul y Santa Catarina realizaron una movilización en São Paulo, el pasado 13 de julio, para denunciar la falta de medidas que garanticen la salud y seguridad en las unidades de la transnacional.
Mediante un recorrido por las principales calles del centro de la ciudad, integrantes de los sindicatos y trabajadores de las unidades de la multinacional marcharon y ejemplificaron a través de disfraces y carteles la situación que deben soportar para conservar sus puestos de trabajo.
«Los ritmos de producción agotadores, el acoso moral y la falta de notificación de accidentes y enfermedades laborales son habituales. Para JBS lo que realmente importa es el beneficio por encima de todo, aunque esto requiera triturar vidas humanas durante este proceso», relató un referente del Sindicato de Trabajadores de la Alimentación de Carambeí a la Rel UITA.
Asimismo, la medida de lucha buscó defender el mantenimiento de la RN36, sin cambios ni retrocesos como lo plantearon y quieren ejecutar el gobierno de Bolsonaro y las empresas frigoríficas.
JBS actualmente es la mayor empresa mundial de procesamiento de proteínas animales y ha batido récords de rentabilidad, incluso durante la pandemia de Covid-19.
