En un esfuerzo por mitigar el impacto socioeconómico de la crisis en Gaza, la Organización Internacional del Trabajo OIT puso en marcha un programa de empleo de emergencia como parte de su Plan de Recuperación de Emergencia ERP para el Territorio Palestino Ocupado.
Este programa busca abordar los desafíos derivados de los elevados niveles de destrucción y desempleo, mientras restablece servicios públicos esenciales como el agua y el alcantarillado, clave para prevenir crisis de salud pública.
La Directora Regional de la OIT para los Estados Árabes, Ruba Jaradat, destacó la importancia del programa al señalar: “La OIT se ha comprometido a impulsar una recuperación en Gaza y la Ribera Occidental que haga hincapié en la reconstrucción de infraestructuras críticas, la generación de empleo decente y el fomento de la resiliencia económica inclusiva”.
La iniciativa prevé emplear a 1.245 trabajadores y generar más de 112.000 días de trabajo para agosto de 2025, realizando obras esenciales en colaboración con el Fondo Palestino de Empleo y otras agencias de la ONU.
El programa se basa en un proyecto piloto llevado a cabo a principios de 2024, que generó 13.500 días de trabajo y empleó a 150 personas para prestar servicios sanitarios y municipales.
La crisis en Gaza, agravada por meses de conflicto, ha desplazado al 75% de la población y dejado más de un millón de personas sin hogar, con tasas de desempleo que alcanzaron un 80% en 2023, según investigaciones de la OIT. Las infraestructuras críticas, incluidas viviendas, sistemas de salud y redes eléctricas, han sufrido daños devastadores, lo que resalta la urgencia de programas como el de empleo de emergencia.
Con un presupuesto total de 20 millones de dólares, el ERP de la OIT comprende tres fases: socorro inmediato, evaluación del impacto de la guerra en el mercado laboral y recuperación temprana. Este nuevo programa, parte de la última fase, no solo busca restablecer los medios de vida en Gaza, sino también contribuir al desarrollo de competencias, la protección social y la recuperación empresarial, alineándose con el enfoque global de las Naciones Unidas en contextos de crisis y recuperación.
