El Modelo de Identificación del Riesgo de Trabajo Infantil (MIRTI) es una herramienta que permite, a partir de la información estadística existente en los países, identificar los territorios más vulnerables al trabajo infantil, y determinar en qué zonas deben concentrar los esfuerzos.
A través de un informe, la Red Latinoamericana contra el Trabajo Infantil destacó la importancia de la articulación del MIRTI y el Índice de Vulnerabilidad al Trabajo Infantil, de acuerdo con la diversidad de contextos político-institucionales y las características de cada país.
“En la práctica, cada país cuenta con fichas nacionales de acuerdo con su división administrativa. En ellas se incluyen mapas que identifican niveles de bajo, medio y alto riesgo de trabajo infantil por municipio y que muestran factores vinculados con la trayectoria del trabajo infantil y adolescente peligroso”, indicó el documento de la organización.
Por otro lado, el comunicado resaltó las “buenas prácticas identificadas”, como la participación de amplios sectores del Estado, la transferencia de la metodología a actores clave del sistema nacional de estadísticas y el diseño de una guía técnica sobre los modelos de riesgo.
Sistematización e implementación-MIRTI-ALC
En cuanto a los resultados de la implementación del modelo, ampliaron que tres de los países han institucionalizado las herramientas, incorporando de manera formal las estrategias de política de prevención y erradicación del trabajo infantil: Argentina y Colombia con el MIRTI, y Costa Rica con el Programa de Trabajo Decente 2019-2023.