La industria cárnica uruguaya enfrenta una fuerte crisis, con 1.400 trabajadores en seguro de paro y al menos 1.000 que perdieron todo ingreso cuando su subsidio venció en junio. Martín Cardozo, presidente de la Federación Obrera de la Industria de la Carne y Afines (FOICA), sostuvo que la situación «es más que preocupante, estamos ante un drama social de enormes proporciones».
Los más afectados son empleados de frigoríficos clave como Lorsinal (Montevideo) y Rosario (Colonia), propiedad del grupo chino Sundido Holding, que no reciben salarios desde abril. Según la información suministrada por la Rel UITA, a estos se suman trabajadores de plantas en Paysandú, Salto y Tacuarembó, además de aquellos en «plantas pequeñas sin representación sindical», según detalló Cardozo.
Tras una reunión con el ministro de Trabajo, Juan Castillo, se acordó crear una mesa de negociación que incluirá a los ministerios de Ganadería y Economía. Sin embargo, Cardozo advierte sobre la lentitud burocrática: «Para quienes no cobran desde hace meses, cada día de trámite es una condena. La urgencia choca contra la maquinaria del Estado*.
El dirigente sindical reconoció la «buena voluntad» del Ministerio de Trabajo, pero aclaró que la solución final depende del Ministerio de Economía y Finanzas. «El problema se agrava porque muchas empresas no muestran señales de reactivación. Sin trabajo y sin subsidio, ¿cómo sobreviven estas familias?», cuestionó.
La FOICA prepara un informe detallado para presentar en los próximos días.