La Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores CEDOCUT alertó sobre la «grave situación laboral que atraviesa su país», denunciando despidos masivos, persecución sindical y la falta de control del Estado sobre estas acciones. Según la organización, en las últimas semanas, más de 20 empleados de Coca-Cola fueron despedidos únicamente por pertenecer a un sindicato.
“Estamos viendo cómo las empresas transnacionales condicionan a los trabajadores para que no se afilien a sindicatos y centrales sindicales. Algo que antes no ocurría en el país”, advirtió la CEDOCUT en un comunicado oficial. Además, señala que esta crisis se agrava por la permisividad del Ministerio de Trabajo, al que acusan de “evadir su responsabilidad” y no ofrecer soluciones.
Denuncias de desmantelamiento y precarización
La CEDOCUT también alertó sobre el riesgo de desmantelamiento de empresas públicas del sector eléctrico y petrolero, debido a la falta de directores en estas entidades, lo que podría facilitar su venta y afectar derechos laborales clave como la negociación colectiva.
“La libertad sindical y la contratación colectiva están en peligro”, subrayó el documento, en el que el sindicato exige restaurar las instancias tripartitas entre Gobierno, empleadores y trabajadores, como lo recomienda la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Entre otras medidas urgentes, la Confederación también solicita fortalecer el Consejo Nacional de Formación y Capacitación, reactivar el SECAP y garantizar espacios para tratar la violencia y el acoso laboral en el marco del Convenio 190 de la OIT, ratificado por Ecuador.
Llamado a la comunidad nacional e internacional
Ante esta situación, la CEDOCUT hizo un llamado a la comunidad nacional e internacional, así como a los medios de comunicación y organizaciones de derechos humanos, para que denuncien estos atropellos y exijan respuestas por parte del Estado.
“No permitiremos que nos silencien ni que destruyan el derecho al trabajo digno y a la organización sindical”, afirmó Edwin Bedoya Ramírez, presidente nacional de la CEDOCUT.