Con el apoyo de la unión Europea, la Organización Internacional del Trabajo renovará la iniciativa que promueve el trabajo decente a través de la conducta empresarial.
Según el comunicado del organismo, las organizaciones implementadoras: OIT, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), continuarán consolidando los resultados hasta ahora alcanzados, rastreando los impactos y buscando expandir y escalar los compromisos, políticas y buenas prácticas existentes.
El proyecto pasará a un periodo de transición con el fin de preparar el terreno para una segunda fase, con la contribución del Departamento de Alianzas Internacionales de la Unión Europea.
Las actividades del proyecto de transición buscarán alinearse con estas iniciativas, teniendo en cuenta que, en los próximos años, servirá como medida de acompañamiento al impacto de estos desarrollos regulatorios en la región.
Los tres objetivos planteados serán:
- Apoyar a las empresas que operan en la región para llevar a cabo prácticas de debida diligencia de la CER que estén en línea con los principios y estándares de CER, que respeten los derechos humanos, el medio ambiente y los derechos laborales.
- Contribuir al desarrollo y la implementación de políticas nacionales, marcos regulatorios y legislativos sobre CER, incluidos los Planes Nacionales de Acción sobre empresas y derechos humanos y políticas sectoriales, para garantizar la alineación con los principios y estándares de la CER y fortalecer el acceso a la reparación.
- Fomentar la participación y el diálogo de múltiples partes interesadas para impulsar la adopción de la CER.