En su último informe, la Organización Internacional del Trabajo reveló que la crisis está reduciendo el poder adquisitivo de la clase media y afecta de manera fuertemente a los hogares de bajos ingresos.
El documento demostró que los salarios mensuales disminuyeron en términos reales de 0,9 por ciento en la primera mitad de 2022, y confirmó que es la primera vez en este siglo que el crecimiento del salario real global ha sido negativo.
“Las múltiples crisis mundiales a las que nos enfrentamos han provocado un descenso de los salarios reales. Esto ha colocado a decenas de millones de trabajadores en una situación desesperada, ya que se enfrentan a una incertidumbre cada vez mayor», sentenció el Director General de la OIT, Gilbert F. Houngbo.
La investigación expuso una aceleración de la inflación de los precios, con un impacto veloz que erosiona el valor real de los salarios mínimos en numerosos países.
Respecto a la región, la OIT confirmó que, el crecimiento del salario real descendió a menos 1,4 por ciento en 2021 y menos del 1,7 por ciento en el primer semestre de 2022.