El pasado 28 de enero, la Cámara de Diputados de Bolivia aprobó media sanción del proyecto presentado por el Gobierno de Luis Arce, en el transcurso del día se espera que el Senado defina su instalación.
Ante este panorama, el Colegio Médico de Bolivia confirmó la realización de un paro nacional indeterminado, con manifestaciones y protestas pero sin dejar de atender a los enfermos de Covid-19.
«Durante el tiempo de vigencia de la declaratoria de emergencia sanitaria no podrán ser interrumpidos los servicios del sistema nacional de salud como consecuencia de paros, huelgas, protestas, jornadas académicas u otras análogas», indica uno de los apartados de la norma.
Según el portal de noticias La Razón, la reforma legislativa autoriza al Ministerio de Salud a contratar a médicos no titulados en Bolivia, estudiantes y médicos jubilados. Según el Colegio de Médicos de La Paz es una vía para el retorno de brigadas médicas cubanas que fueron retiradas del país por el Gobierno de Jeanine Áñez a finales de 2019.
El presidente del Colegio Médico de Bolivia, Cleto Cáceres, confirmó que se realizó un Consejo Médico Nacional de emergencia donde se tomaron determinaciones, y manifestó que el sector exigirá la anulación o modificación (en cinco aspectos) del proyecto de Ley de Emergencia Sanitaria.
Por su parte, el presidente de la Cámara Diputados Freddy Mamani amparó el proyecto en el marco de la emergencia sanitaria por el brote del coronavirus: “Lo que no puede pasar es que nuestros hermanos médicos puedan estar en paro porque eso estaría atentando contra la salud. Una vez que pase la pandemia, se restablecen todos sus derechos”.
Joel Gutiérrez, el presidente de la Sociedad Boliviana de Medicina Crítica y Terapia Intensiva, manifestó que una medida de esta naturaleza “No hay coherencia en eso de contratar jubilados, porque se los expondría más al ser personas de alto riesgo. Lo mismo con estudiantes, que no tienen la suficiente experiencia”.