La Unión General de Trabajadores del Ecuador UGTE expresó su rechazo con la realización de la XXIX Cumbre Iberoamericana, alegando que este encuentro se ha convertido en un espacio que promueve políticas que afectan los derechos laborales y favorecen al capital transnacional.
En un comunicado, la UGTE denunció que bajo el discurso de integración y desarrollo, la cumbre fomenta acuerdos económicos que precarizan el trabajo y promueven la flexibilización laboral.
El sindicato denunció que estas políticas «destruyen las conquistas de los trabajadores en toda la región» y consideró que la agenda neoliberal enmascara promesas de progreso, pero en realidad incrementa la explotación y la desigualdad.
Según la organización, estos modelos afectan la dignidad de los trabajadores y favorecen el despojo de derechos laborales duramente conquistados.
La UGTE reafirmó su compromiso con la clase trabajadora ecuatoriana y su lucha contra modelos que, en su opinión, perjudican el bienestar de los pueblos. “Exigimos políticas que prioricen el trabajo digno, los derechos laborales y el respeto a la soberanía de nuestro país”, expresó la organización.