La Organización Internacional del Trabajo publicó un informe sobre el trabajo decente y la economía del cuidado, con la intención de aportar datos clave para la discusión que se llevará a cabo en la 112.a reunión (2024) de su Conferencia Internacional del Trabajo.
El documento repara en que, a pesar de que , en los últimos diez años, países de América Latina y el Caribe han logrado avanzar en materia de derechos de la mujer y se han realizado avances en el ámbito de los cuidados, persisten grandes desafíos respecto al ingreso, permanencia y progreso de las mujeres en el empleo y la ocupación.
«La brecha en la distribución de los cuidados continúa siendo una de las principales razones de la desigualdad de género que enfrentan las mujeres al interior de sus hogares y en el mercado laboral», añadió el análisis.
El organismo se refiere al Convenio 156 y la Recomendación 165,como el primer paso para promover la igualdad de oportunidades en el empleo entre personas con responsabilidades familiares y aquellas que no las tienen.
Además de prohibir la discriminación por motivos de responsabilidades familiares y reducir la carga de trabajo de trabajadores con responsabilidades familiares, especialmente mujeres, para lograr la igualdad de oportunidades en el trabajo.