La Confederación Sindical Internacional se solidarizó con su afiliada en Rusia, la Confederación del Trabajo de Rusia (KTR), y con sus miembros, por el ataque terrorista que tuvo lugar en Crocus City Hall en Moscú, el pasado 22 de marzo, y en el que perdieron más de cien personas, entre ellos trabajadores y sus familias reunidos para disfrutar de una velada musical.
«Hacemos llegar nuestro más sentido pésame a las familias de los fallecidos y a todos los heridos. Lo denunciamos en los términos más enérgicos e instamos a que se detenga a quienes están detrás de esta atrocidad y a que rindan cuentas«, declaró Luc Triangle, Secretario General de la CSI.
La organización se solidarizó con su afiliada, la Confederación del Trabajo de Rusia (KTR), y con sus miembros.
La Justicia rusa decretó este domingo prisión preventiva por dos meses para cuatro sospechosos de realizar el atentado en la famosa sala de conciertos rusa, imputados con cargos de terrorismo y con posibilidad de afrontar una cadena perpetua.
