Ante los elogios del Fondo Monetario Internacional al superávit presupuestario implementado por el Gobierno de Argentinas, la Confederación Sindical Internacional alertó el aumento significativo de la pobreza, la escasez de alimentos y un recorte presupuestal letal en la educación y los servicios públicos.
El secretario General de la CSI, Luc Triangle, sostuvo que los despidos en el sector público, la disminución de las pensiones y el crecimiento del desempleo, son solo algunas de las consecuencias que han despertado la indignación de diversos sectores.
En ese sentido, aplaudió la respuesta de la sociedad civil, con la organización de movimientos sindicales y organizaciones que repudian estas políticas y defienden la justicia y la democracia.
Según la confederación, la convocatoria de huelgas y protestas refleja la preocupación por el impacto social y económico de las decisiones tomadas en el país.
«No hay que alabar esta situación, sino condenarla y oponerse a ella. Por ello, el movimiento sindical mundial se solidariza con la CGT, la CTA-T y la CTA-A en su defensa de la justicia y la democracia, en su convocatoria de huelga general para el 9 de mayo y en su protesta del 23 de abril en apoyo de la educación pública, la investigación y el desarrollo científico en Argentina», sostuvo el comunicado difundido en las últimas horas.
