La Organización Internacional del Trabajo junto a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe publicaron una nueva edición de su informe “Coyuntura Laboral en América Latina y el Caribe (No 28): Hacia la creación de mejor empleo en la postpandemia”, en el cual se analiza la evolución de los mercados laborales en América Latina y El Caribe en 2022.
El documento evidenció que los principales indicadores laborales han vuelto a los valores prevalecientes en 2019 y que la recuperación ha sido heterogénea a lo largo de la región, aunque en ciertos países, no alcanzan los niveles prepandemia.
De igual forma, la recuperación fue significativamente mayor entre mujeres, en comparación con los hombres, y mayor entre los jóvenes respecto a los adultos, según los datos suministrados por la investigación.
Las brechas de género y etarias permanecen latentes
Pese a que se identificó una mejora, aún persisten importantes brechas de género y etarias en materia de tasas de participación y de desocupación laboral. La productividad laboral promedio de la región experimentó una caída en 2022, destacando la contracción de la productividad en sectores como la industria, la construcción y el comercio.
Mientras que, los salarios medios reales se estancaron en 2022, contrastando con el aumento observado en 2021, y reflejando el impacto de la mayor inflación.
Las entidades a cargo sugieren impulsar políticas laborales activas que promuevan una mayor creación de empleo, una mayor formalización y una mayor (y mejor) inclusión de mujeres y jóvenes en el mercado de trabajo, a través de la ampliación de los instrumentos en materia de política laboral y la mejora de la articulación entre ellos, a fin de evitar contracciones en el empleo. También se requiere más énfasis en la reactivación económica incluyendo sectores impulsores y dinamizadores del crecimiento económico y del empleo.
