La Internacional de la Salud pública, junto a la de Fundación Nodo XXI, retoma la situación actual de los cuidados en la región teniendo en cuenta las respectivas legislaciones, el rol de las instituciones públicas y las medidas políticas en algunos países como Uruguay, Ecuador, México y Chile.
“Hay básicamente tres tipologías: el modelo liberal, que se caracteriza por una asistencia social residual, es decir, en donde el Estado se preocupa solo de aquellas familias que no tienen acceso al bienestar a través del mercado. Aquí, la respuesta es subsidiaria, focalizada y el Estado tiene un bajo gasto social. Ejemplo de ello es Reino Unido, Estados Unidos y Chile”, explicó Camila Miranda.
A este modelo le sigue dos propuestas más: el corporativo conservador, que se caracteriza por una mercantilización media y el socialdemócrata, en el que se reconocen los derechos sociales universales a las personas y comunidades, no por el estándar de ser trabajador o por si decidió cuidar o no a su familia.
Durante el encuentro del pasado 25 de octubre, se profundizó en la «organización social del cuidado en el centro» y uno de los desafíos de los actuales sistemas de cuidado es definir a quienes van destinados dichos cuidados.
“Comprender y problematizar la relevancia del cuidado y su reconocimiento, así como la relación con los servicios públicos; o Desarrollar conocimiento aplicados para replicar los talleres en las respectivas organizaciones sindicales de procedencia”, fue uno de los objetivos delimitados por ISP en el ciclo de talleres.
