El pasado 13 y 14 de octubre una comisión especial de la Internacional de Servicios Públicos, encabezado por Rosa Pavanelli, viajó a Ecuador con el objetivo de entablar diálogo con el Gobierno para presentar propuestas de reformas laborales que restituyan los derechos de los trabajadores.
Sin embargo, el Ejecutivo le negó el encuentro presencial a los dirigentes, a pesar de que su visita se planifico con varios meses de anticipación, y se enviaron cartas de confirmación al Ejecutivo y al Legislativo.
Ante este escenario, desde la organización anticiparon la presentación de las denuncias correspondientes a la Organización Internacional de Trabajo, con enfoque en la violación de los convenios 87 y 98 de la OIT.
«Para el movimiento sindical era importante iniciar un proceso de diálogo social a nivel nacional y evitar que nuevamente Ecuador sea denunciado por los trabajadores ante la OIT por violación a los derechos laborales. Para eso llegamos a Ecuador en esta misión de la ISP y el Gobierno decidió no recibirnos», sentenció Pavanelli al portal de noticias Infobae.
Por su parte, Marcelo Di Stefano, dirigente mundial de la IPS y líder sindical argentino, aseguró: «Seguimos sin saber si el Gobierno está dispuesto a cumplir con lo dispuesto por la OIT en junio 2022, recibiendo una misión internacional para discutir cambios en las políticas y en las leyes para adecuarlas a lo dispuesto en las Normas Internacionales del Trabajo».
