En una entrevista reciente, Sukti Dasgupta, Directora del Departamento de Condiciones de Trabajo e Igualdad de la Organización Internacional del Trabajo, destacó los esfuerzos de la organización en áreas como la economía del cuidado, la igualdad de género y la lucha contra la violencia y el acoso laboral. “La calidad del trabajo es un aspecto clave de la Agenda de Trabajo Decente de la OIT”, afirmó Dasgupta, subrayando que las condiciones laborales justas no solo benefician a los trabajadores, sino también a la productividad empresarial.
Durante su misión a Chile, Dasgupta resaltó avances significativos, como la resolución histórica de 2024 sobre el trabajo decente en la economía del cuidado. Este documento reconoce que el cuidado es esencial para el funcionamiento de la sociedad y requiere inversiones urgentes para garantizar servicios de calidad.
“El trabajo de cuidado depende de condiciones laborales decentes, pero muchos trabajadores, especialmente los domésticos y migrantes, aún enfrentan precariedad”, explicó Dasgupta. La resolución establece un plan de acción que incluye el desarrollo de políticas basadas en el marco “5R” (reconocer, reducir, redistribuir, recompensar y representar el trabajo de cuidado).
La igualdad de género también ocupa un lugar central en la agenda de la OIT. Según Dasgupta, abordar la interseccionalidad es crucial para enfrentar las desigualdades que afectan a mujeres, personas con discapacidad y otros grupos vulnerables.
Otro tema destacado es la creciente ratificación del Convenio 190 sobre violencia y acoso en el mundo del trabajo. Hasta la fecha, 45 países han ratificado este convenio, incluido Chile, que lo implementó en 2024 mediante la Ley Karin. Dasgupta señaló que la OIT apoya a los países mediante la recopilación de datos, el fortalecimiento de marcos legales y campañas de sensibilización: “La violencia y el acoso no tienen lugar en el mundo del trabajo”.
El compromiso de la OIT también se extiende a la protección de los derechos de los trabajadores migrantes y a la promoción de salarios dignos, temas que fueron objeto de consenso en reuniones recientes. Dasgupta subrayó que la clave para el éxito radica en el diálogo social y la colaboración tripartita entre gobiernos, empleadores y trabajadores.
Finalmente, la OIT está consolidando su liderazgo global a través de alianzas estratégicas, como la plataforma «South4Care» para la cooperación Sur-Sur. Estas iniciativas buscan fortalecer la capacidad de los países para enfrentar desafíos comunes y compartir soluciones innovadoras. “La calidad del trabajo no es solo un objetivo, sino un motor de desarrollo sostenible”, concluyó Dasgupta, reafirmando el compromiso de la OIT con un futuro laboral más equitativo y seguro.