En el marco de la Jornada Internacional de Conmemoración de la salud y Seguridad como Derecho Fundamental en el Trabajo, la Confederación Sindical Internacional destaca los puntos claves para salvaguardar la vida en los espacios laborales.
Como primer punto de partida, desde la organización plantean que la salud y la seguridad sean consideradas como un derecho fundamental por la Organización Internacional del Trabajo OIT, junto con otros derechos, como la libertad sindical, el derecho de negociación colectiva y la protección frente a la discriminación, el trabajo forzoso y el trabajo infantil.
La secretaria general de la CSI, Sharon Burrow, indicó que “se trata de una cuestión que reviste una importancia capital y que lleva ya demasiado tiempo sin resolverse. Normas inadecuadas de salud y seguridad en el lugar de trabajo cuestan cerca de 2,78 millones de vidas cada año.
Para la referente, el hecho de que estos temas sean un derecho fundamental de la OIT, incrementa la responsabilidad de los Gobiernos y empleadores para poner fin a las muertes, y dotaría a los sindicatos de mayores medios de presión en los centros de trabajo.
Por otro lado, desde la CSI proponen que se clasifique al Covid como una enfermedad profesional, en miras a proporcionar una mayor protección a los trabajadores y permitir el acceso de fondos de compensación para los familiares de los empleados que pierdan la vida a causa del virus.
Finalmente, reclaman impulso en a producción de vacunas, que se eliminen los obstáculos respecto a la propiedad intelectual y la búsqueda de beneficios para garantizar vacunas, pruebas, tratamientos y otras herramientas en materia de salud públicas.
