Desde la Confederación Sindical de Trabajadores y Trabajadoras de las Américas denunciaron y rechazaron las dos masacres que se registraron en los últimos días en Colombia, cuyas víctimas son lideres sociales y sindicales que se oponen a la continuidad del actual modelo político que atenta contra sus derechos.
El portal de noticias Comunica Sul confirmó que reconocidos líderes sociales del Tolima fueron brutalmente asesinados junto con otros dos miembros de su familia, y en Santa Marta, municipio de Magdalena, una maestra venezolana y sus dos hijos fueron encontrados sin vida.
Por su parte, la Defensoría del Pueblo de Colombia advirtió la probabilidad de que aumenten las acciones violentas contra los líderes sociales en los días previos a las elecciones presidenciales.
Varias organizaciones del conglomerado sindical de la región han manifestado públicamente, en los últimos meses, su preocupación ante la inestabilidad social y la fuerte persecución de la que han sido víctimas los referentes sindicales, que evidencian la reducción de derechos como producto de las medidas políticas implementadas por el actual gobierno.
La agencia de comunicación latinoamericana con sede en Brasil denunció también que en los últimos días se ha impedido el ingreso de observadores internacionales a Colombia para seguir la elección presidencial. Entre ellos, se encuentra Terri Mattsonue, deportada en las últimas horas; Alejandro Rusconi, al que se le impidió entrar bajo la excusa de que no tiene invitación; y Paul-Emile Dupret, detenido en Migración del aeropuerto de Bogotá.
