A raíz de la desestabilización social interna, en respuesta a las medidas económicas implementadas en los últimos meses por el presidente Guillermo Lasso en Ecuador, organizaciones del sector social, sindical e indígenas encabezaron una serie de manifestaciones en la última semana, con un gran número de muertos y heridos por la fuerte represión.
La Confederación Latinoamericana y del Caribe de Trabajadores Estatales mostró su apoyo y compañía al pedido realizado por la Federación Ecuatoriano de Trabajadores Municipales y Provinciales, de cara a la jornada de lucha y movilizaciones del pasado 22 de junio.
El listado compuesto por diez puntos exige regulación en los precios bases de la canasta básica familiar, el cese de la represión policial y militar, un freno a los despidos en el sector público y privado, la aprobación del Código de Trabajo presentado por la FUT en 2021 y el pago de la deuda del Estado al IESS, entre otros.
“Todos los trabajadores enfrentamos a un gobierno autoritario, prepotente, incapaz de responder a las demandas presentadas desde junio del año pasado, técnicamente documentadas para enfrentar la crisis económica y generar una verdadera política laboral a favor de quienes generamos la riqueza”, sentenció la federación en la convocatoria.
Recientemente, las organizaciones que conforman el paro general en ese país confirmaron que no cesarán con las manifestaciones hasta que no tengan una respuesta acorde con las necesidades actuales, en materia económica y social.
