A poco de que culmine la 112.ª Conferencia Internacional del Trabajo de la OIT, que se realiza en Ginebra desde el 3 de junio, se han adoptado un conjunto de conclusiones sobre el trabajo decente en la economía del cuidado.
El documento titulado «Resultado de la Discusión General sobre el Trabajo
Decente y la Economía del Cuidado», fue presentando el pasado 13 de junio, y se basa en una amplia discusión general sobre el tema, reconoce la importancia de la economía del cuidado para el bienestar individual, familiar y social, y subraya la necesidad de garantizar que las personas que trabajan en este sector tengan acceso a condiciones de trabajo decentes.
También evidencia la necesidad de promover políticas que apoyen el desarrollo de la economía del cuidado, como la inversión en infraestructura y servicios de cuidado, la promoción de la igualdad de género y la protección de los derechos de los trabajadores.
En ese sentido, el informe final insta al Consejo de Administración de la OIT a prestar la debida consideración a estas conclusiones y a orientar a la Oficina Internacional del Trabajo sobre su puesta en práctica.
Asimismo, solicita al Director General de la OIT a elaborar un plan de acción sobre el trabajo decente y la economía del cuidado, que será presentado al Consejo de Administración en su 352.ª reunión (octubre-noviembre de 2024), y a mantener informado al respectivo Consejo sobre la aplicación de las conclusiones.
Las respectivas conclusiones «se comunicarán a las organizaciones internacionales y regionales pertinentes para fomentar la colaboración y el intercambio de buenas prácticas», y se manifiesta al organismo la importancia de que se tengan en cuenta las conclusiones en la elaboración de futuras propuestas de Programa y Presupuesto, así como en la movilización de recursos extrapresupuestarios.
Principales conclusiones:
- Reconocimiento del trabajo de cuidado: Se reconoce el trabajo de cuidado como un trabajo de vital importancia para la sociedad y se insta a los gobiernos a valorarlo y reconocerlo adecuadamente.
- Trabajo decente en la economía del cuidado: Se pide a los gobiernos que adopten medidas para garantizar que las personas que trabajan en la economía del cuidado tengan acceso a condiciones de trabajo decentes, incluyendo salarios dignos, protección social y seguridad en el trabajo.
- Inversión en la economía del cuidado: Se insta a los gobiernos y a los interlocutores sociales a invertir en la economía del cuidado, incluyendo la provisión de infraestructura y servicios de cuidado de calidad, la formación y el desarrollo profesional de los trabajadores del cuidado y la promoción de la innovación en el sector.
- Promoción de la igualdad de género: Se subraya la importancia de promover la igualdad de género en la economía del cuidado, abordando las cargas desproporcionadas de cuidado que recaen sobre las mujeres y las niñas.
- Protección de los derechos de los trabajadores: Se insta a los gobiernos a garantizar que los trabajadores del cuidado, incluidos los migrantes y los trabajadores del sector informal, tengan acceso a sus derechos fundamentales y a la protección social.