Este jueves 5 de diciembre, dirigentes de la Asociación de Funcionarios/as del Ministerio de Desarrollo Social y Familia ASOFUMI llevaron a cabo una ocupación pacífica en el gabinete de la ministra de Desarrollo Social, Javiera Toro. La protesta surge como respuesta al retraso en la aprobación de los Decretos con Fuerza de Ley (DFL) para las tres Subsecretarías del Ministerio, esenciales para el encasillamiento y reordenamiento laboral.
La acción fue respaldada por la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), representada por Patricio Lama Santibáñez y Andrea Palacios Riquelme. “Exigimos respuestas concretas y precisas. Estamos a punto de cerrar el año presupuestario 2024, y aún no tenemos certezas sobre los DFL. No nos moveremos hasta obtener una solución”, expresó Lester Campos, presidente nacional de ASOFUMI.
Antecedentes del conflicto
En junio de 2022, ASOFUMI firmó un protocolo de acuerdo con el Ministerio para revisar y modificar los DFL de las tres Subsecretarías del MIDESOF, una medida clave para generar estabilidad laboral y mejores condiciones para los trabajadores.
Pese a reuniones sostenidas durante 2023 y un preacuerdo alcanzado en 2024 para establecer una proporción de 65% planta y 35% contrata, la Dirección de Presupuestos (DIPRES) no ha finalizado la tramitación. La Asociación denuncia que los retrasos afectan directamente la estabilidad de los trabajadores.
Apoyo sindical y demandas
Desde ANEF, Patricio Lama enfatizó: “Los trabajadores públicos hemos tenido paciencia, pero esta tiene un límite. No podemos seguir en la precarización y la inestabilidad mientras se dilatan los procesos de ley”.
La ocupación, según los dirigentes, busca presionar para que el Ministerio cumpla con los compromisos adquiridos. “Este proceso no solo mejora la estructura interna, sino que otorga dignidad y seguridad a los funcionarios”, añadió Campos.
La protesta se enmarca en el cierre del año presupuestario, un periodo crítico para definir los recursos y prioridades legislativas. Mientras tanto, ASOFUMI advierte que no cesará sus movilizaciones hasta que se entreguen garantías claras sobre los DFL y el encasillamiento de los funcionarios.