El Consejo Nacional de Salud, que agrupa a los colegios profesionales y sindicatos de trabajadores sanitarios de Bolivia, declaró una huelga de 10 días en rechazo a la Ley de Emergencia Sanitaria promulgada por el presidente Luis Arce.
La nueva ley que establece un marco normativo que incluye la prohibición de huelgas del personal sanitario durante la pandemia, deteriora cada vez más la relación de los trabajadores de salud y el MAS.
«El Consejo Nacional de Salud instruye a todos sus integrantes a acatar el paro general definido y movilizado hasta la fecha del 28 de febrero del presente año, esto en razón a la falta de voluntad del gobierno de dialogar con el sector», explicó el presidente de ese organismo, Cleto Cáceres, en conferencia de prensa.
Por su parte la Iglesia Católica de Bolivia trata de mediar y llamó a las partes a negociar. «Ojalá se trabaje en una mesa de diálogo, en un encuentro fraterno para que todos estén de acuerdo con lo que se escribe. Hay que buscar y hay que agotar el diálogo porque todo está al servicio de la vida», expresó el presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Centellas, a través de un comunicado.
Desde el Gobierno piden a los médicos que levanten la huelga y se preparen para la campaña nacional de vacunación contra el coronavirus que comenzará en unos días.
“Tenemos que empezar a vacunar, tenemos que salvar vidas de los bolivianos, tenemos un compromiso con la sociedad y esa es la exhortación que hacemos al personal médico, todos tienen que cooperar en este plan de vacunación”, expresó el presidente Luis Arce, en un acto en un regimiento militar, transmitido por la televisión estatal.