Mediante el programa Amazon Flex, la multinacional de envíos habilitará a repartidores independientes para que estreguen sus productos, garantizando un pago de 110 pesos por jora de trabajo.
El método de envió lleva funcionando en Estados Unidos cinco años. En ese país un grupo de repartidores del programa logró sindicalizarse y conseguir beneficios como vacaciones pagadas y un mínimo pago por hora.
Sin embargo, en el país centroamericano, la empresa ha mantenido su postura de que los inscritos al programa no son sus empleados, pese a utilizar su infraestructura, usar sus camionetas y vestir uniformes con logos de Amazon.
Sin embargo, trascendió en medios de comunicación, que la empresa intentó prescindir del contrato de los trabajadores que se sindicalizaron.
La empresa estadounidense también oficializó «Hub Delivery», un programa de entrega de paquetes con ayuda de pequeños comercios ya establecidos. El proceso de reparto consiste en entregar a los locales las encomiendas cada mañana, con la flexibilidad que los entreguen en sus inmediaciones a lo largo del día y en función de su horario de negocio.
Por último, se oficializó “Amazon Delivery Service Partners”, la plataforma que pretende dar facilidades para que terceros creen sus propias empresas de reparto de última milla y, a diferencia de Flex, genera socios de reparto involucrando a quienes no tienen ningún tipo de experiencia o recursos de logística.
